La cultura en el país mantiene un pensamiento muy arraigado en el que en México los hijos se encargan de cuidar a sus padres, como ellos lo hicieron con sus padres pero, debido al cambio de rutina diaria que ha ido transformándose con el paso del tiempo, las familias mexicanas cada vez presentan más dificultades para poder brindarle el cuidado que requiere su familiar mayor en casa. Estos factores de cambio van desde la alta densidad de las zonas metropolitanas, las largas jornadas de trabajo, el incremento en el tráfico, las familias cada vez son más pequeñas, hay más mujeres trabajando, entre otros aspectos que comienzan a obligar a la sociedad mexicana a adoptar “modelos” diferentes a los aprendidos.
Según estadísticas del INEGI y del Consejo Nacional de Población en México la población de personas mayores aumentará hasta convertirse en un 12.1% de la población total y la esperanza de vida promedio aumentará a 77 años en 2030. Estos resultados significan que conforme pasen los años, el incremento de la población de personas mayores será irreversible, y la sociedad mexicana debe tomar conciencia de los retos que se avecinan en materia de cuidado a los mayores, darse abasto a la futura demanda que surgirá en servicios de salud, vivienda, pensiones y espacios urbanos para facilitar su vida.
Para los mexicanos la necesidad de cuidar a los padres sigue siendo la misma, pero debido a las circunstancias que actualmente se viven, los hijos han comenzado a pensar en alternativas diferentes para ofrecerles el cuidado que requieren. Debido a diferentes factores de vulnerabilidad como alguna depresión, diabetes, hipertensión, padecimientos en el corazón, enfermedades cognitivas, entre muchas más, su nivel de dependencia aumenta y es el momento en el que debe ponerse atención para mantener su salud y estabilidad.
Alternativa de vida con calidad
Las residencias de retiro comienzan a desarrollarse en el país tomando un auge importante debido a su buen nivel de cuidado, lo que las convierte en la opción ideal para que los familiares mayores cuenten con todos los cuidados necesarios con la mejor calidad para sus vidas. Una residencia de retiro es una alternativa que se le puede ofrecer a los padres en la que vivirán con mucha mejor calidad y con mejores cuidados de los que se le pueden ofrecer en casa y tendrán la oportunidad de reactivar su vida social.
Existen diferentes opciones de vida en comunidad como:
- Independent Living
- Assisted Living
- Atención especializada para el deterioro cognitivo leve
- Atención especializada para enfermedades como Alzheimer
La mejor manera en la que una persona mayor puede vivir de forma independiente y evita la errónea sensación de que “genera molestias” a sus hijos es una residencia de retiro pues les permitirá tomar el control de su vida nuevamente siempre bajo los mejores cuidados en un lugar diseñado especialmente para su seguridad, dándoles la certeza de que tendrán toda la atención y apoyo que necesitan en el momento en el que lo requieran.
¿Por qué vivir en una casa de retiro?
- Mantiene a las personas mayores con una vida social activa. Toda persona mayor que tiene una vida social activa tiene salud, mejora su ánimo. Una residencia de retiro ayuda, a través de personal capacitado a que las personas mayores se integren y tengan una vida social activa.
- Da un sentido a su vida. Las residencias de retiro le dan a la persona mayor razones para “arreglarse”, para verse bien todos los días para sus amigos, para sus vecinos, para comer, para realizar sus actividades.
- Extienden su red de soporte, más allá de la familia. Con el paso de los años, una persona mayor se va volviendo cada vez más dependiente, lo que lo vuelve vulnerable al apoyo de sus hijos. En una residencia de retiro, la persona mayor tiene la certeza de que tiene mucha gente a su alrededor que está atento a sus necesidades y se preocupa por su bienestar.
- Tienen un rutina, lo que los ayuda cognitivamente. La rutina, además de darles seguridad y tranquilidad, los ayuda en su parte cognitiva, pues tener rutinas establecidas los ayuda en su organización mental para que su reserva cognitiva se mantenga y su mente trabaje de manera adecuada.
- Administración adecuada de los medicamentos. En una residencia de retiro se le asegura a la persona mayor y a sus familiares que la administración de sus medicamentos será la adecuada y la indicada por el médico, con esto se evita que pueda autorecetarse o pueda tomar una mayor o menor dosis que la necesaria.
- Alimentación balanceada y adecuada. Tener alternativas de menú adecuadas ayuda a que las personas mayores puedan comer mejor, con una dieta balanceada basada en recomendaciones de médicos especializados diseñadas a partir de las necesidades de cada residente.
- Soporte médico. En una residencia de retiro los médicos y las enfermeras todos los días atienden y visitan a los residentes para asegurarse de cómo se sienten, tanto física como anímicamente, a detectar anticipadamente enfermedades, esto, gracias al conocimiento individual previo por parte del personal médico.
- Actividades terapéuticas, sociales, físicas, espirituales. En una residencia de retiro se organizan diariamente actividades en grupo para que los residentes puedan divertirse, pero además, mantener su mente activa. Ejercicios físicos que las personas mayores necesitan para vivir más sanos de acuerdo a sus capacidades y habilidades realizados bajo la supervisión de expertos, estos ejercicios son adecuados también para personas en sillas de ruedas o con algún tipo de impedimento físico.
- Sentido de independencia. Las personas mayores viven seguras y acompañadas, dejan de tener la sensación de que “dan molestias a sus hijos o familia”.
- Alternativas especializadas para personas con enfermedades difíciles de cuidar. Muchas demencias cambian la personalidad de una persona mayor, lo que puede llegar a alterar su vida familiar y entorno. Algunas residencias de retiro permiten a la persona con demencia o Alzheimer gozar de áreas especializadas para su cuidado, dar seguridad de que los cuidadores son capacitados para atender todas sus necesidades.
- Personal capacitado para su cuidado. Una residencia de retiro a diferencia del cuidado en casa o de un asilo, cuenta con personal altamente capacitado para atender a cada uno de sus residentes atendiendo y entendiendo las necesidades individuales de cada uno de ellos.
- Seguridad y tranquilidad para la familia. Las familias que se deciden por tener a sus padres o abuelos viviendo en una residencia de retiro se sienten seguros y tranquilos de que sus seres queridos están bajo el mejor cuidado, ésta opción también puede ser una estadía temporal.
Olvide el pensamiento erróneo de que una casa de retiro significa “abandonar” a su ser querido, dele la oportunidad a su familiar de disfrutar la experiencia de vivir en una residencia que se convertirá en su hogar, donde podrá vivir de la mejor manera, bajo los mejores cuidados y atenciones. En Belmont Village Senior Living, los invitamos a usted y su familiar mayor a conocer nuestra residencia de retiro, en el momento en el que necesiten conocer las instalaciones y programas de cuidado especializado. Si está interesado en agendar una cita, puede hacerlo a través de este enlace ¡Los esperamos con las puertas abiertas!
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